Los aficionados a las carreras de coches en miniatura encontraron una nueva forma de darle vida a sus competiciones compartiéndolas en sus redes sociales, de forma que los apasionados por este tipo de carrera sobre pista eléctrica instalada en un salón, estudio o salón de juegos puedan seguirla desde cualquier parte del mundo. Estos aficionados tiran de creatividad habilidad narrativa y mucha ficción para convertir una afición por los coches fabricados a escala 1:30 en casi una película de A Todo Gas.
Los usuarios del Slot coleccionan coches en miniatura de varias modalidades, campeonatos de turismos, rally slot, pruebas monomarca, etc, vehículos en miniatura que cobran vida más allá del popular Scalextric y la “fórmula de salón” gracias a internet.
Esta nueva plataforma abre a las nuevas generaciones de aficionados al mundo slot una época dorada casi al mismo nivel que los videojuegos. Los usuarios tienen que engrasar las (mini)ruedas con sus propias manos y ver las consecuencias físicamente de los cambios que realizan, algo que en un videojuego no se aprecia. Según las variedades y las modificaciones que apliquen a los coches, como si un carrera real se tratase, pudiendo conseguir la gloria o perderlo todo sin vuelta atrás.
Es este juego todo es posible y nada se puede prever. Si no fijaos en este vídeo de casi 6 minutos rodado por el aficionado Jorge Ávila, donde un Honda NSX vestido con los colores de Castrol Racing se enfrenta a un Audi R8 en una carrera de dudosa legalidad, montada en un circuito Scalextric. Puede pasar de todo, desde que la maqueta urbana se caiga repentinamente, que las motos y contenedores invadan la carretera o simplemente que el Audi R8 de paso a un furgón. Os recomendamos que le echéis un ojo al video y disfrutéis de la época dorada del Slot 2.0