¿Cuáles son las diferencias entre la nueva Clase C y su antecesora? Una respuesta muy fácil seria, TODO. El nuevo sedán compacto de Mercedes Benz es parte de una era que reinventa la tradición de este modelo, para llevarlo a un nuevo nivel de confort y seguridad, gracias a un equipamiento que está un paso en el futuro.
En el primer encuentro con la Clase C, en su versión C180, el primer golpe de vista se tiene la sensación de reconocer sus formas, sus dimensiones y su estilo. Pero también se llega a un nuevo lugar. Presenta un compromiso estético con el dinamismo y logra realizar un discreto quiebre generacional.
A primera vista, la clase C ofrece un capó musculoso y más extenso, con trazos suaves que se desenvuelven a lo largo de su carrocería. Su deportividad, además se aprecia en las aletas horizontales y pisa ruedas bien definidos, dando origen a molduras laterales que subrayan su dinamismo.
La línea del habitáculo cae suavemente hacia el maletero, que parece corto en relación con el resto del auto, pero que esconde una gran capacidad de carga. Se trata de un diseño que le confiere tanto elegancia como espacio, y un notable coeficiente aerodinámico. Sus formas están esculpidas en aluminio en su mayoría, lo que mejora su relación potencia / peso y hace más eficiente su andar.
En la clase C el uso de este metal, resistente y liviano, favorito de la industria aeronáutica, llega a representar hasta el 48 % de la carrocería. Una vez en el interior, se advierte que el puesto del conductor es sorprendentemente dinámico, con una posición cómoda y que garantiza que todo el control resida en el conductor. Ofrece una situación envolvente que recuerda que el confort va de la mano de la seguridad cuando es preciso tener los instrumentos al alcance.
Pero las cosas cambian en los asientos traseros. Con un espacio que entrega una experiencia de confort total, parece un auto de mayores dimensiones. Son los lugares donde destaca el nivel de confort al que ha llegado esta nueva generación de la Clase C.
El diseño de la cabina rescata señales de las gamas deportivas AMG, pero su verdadera vocación es entregar una experiencia superior en un formato más compacto. Se encuentra siempre lista para administrar de un modo fácil e intuitivo los mandos del sistema Touchpad, que permite realizar acciones trazando figuras con los dedos, como aquellas relacionadas con el equipo de audio y vinculadas a los modos de conducción.
Una vez en conocimiento de los sistemas, es hora de comprobar qué ofrece esta nueva clase C en cuanto a dinamismo. El coche despierta con los guiños de sus indicadores y el sonido de su motor. Esconde en su interior 156 Caballos de fuerza y 250 Nm de torsión listos para mover su ligera carrocera y llevarla hasta los 100 kilómetros por hora, partiendo desde cero en tan solo 8.2 segundos.
Es gracias a sus prestaciones, tecnología y control, un auto extremadamente amable. Dueño de un tacto fino y suave, cuando comienza a moverse, entrega respuestas que inmediatamente afirma que será un buen compañero. Lejos de reacciones nerviosas o imprevistas, con una suspensión que sorprende al reunir firmeza y un alto grado de confort, logra un objetivo importante: brindar una alta sensación de precisión y de seguridad.
El placer de manejar la clase C, aumenta al mismo tiempo que el acelerador es presionado. Pero las experiencias en carretera de esta nueva Clase C serán objeto de otro artículo.
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