Quizás tu coche te ha dejado en la calzada varias veces, posiblemente demasiadas ya, y tu presupuesto tampoco permite buscar un coche nuevo, así que no sabes si gastarte el dinero en el taller para arreglarlo o comprar un coche de segunda mano, pero que esté en buen estado, y sea de precio bajo, claro.
Es entonces cuando nos invade el miedo, desconfiamos de los conocidos que nos insisten en que tienen un coche y que no se les ha roto nunca o, incluso buscas por internet y el precio te hace desconfiar de que sea una ganga. Entonces este artículo es para ti.
Claves para buscar coches de segunda mano
Lo habitual es que el vendedor oculte algún que otro fallito para venderlo y tú quieres saber en qué te tienes que fijar cuando buscas un coche, pues bien, aquí te traemos unos pasos para encontrar un buen coche de segunda mano:
- Por fuera. Lo primero que vas a hacer es buscar algún toque, ya que el comprador pretende que parezca que su coche que no es nuevo parezca nuevo, es decir, que aparente estar recién salido del concesionario sin haber sido usado por nadie. Fundamental verlo a plena luz del día y tocarlo, puesto que quizás se ha tapado algún golpe o arañazo importante.
- Ruedas. Es necesario informarse por la fecha y kilómetros de los neumáticos y fíjate si están cuarteados, si tienen poca presión o si el dibujo se mantiene profundo.
- Por dentro. No solo mires en los asientos delanteros, es decir, piloto y copiloto. Revisa en los asientos traseros, en el techo, en el maletero. Comprueba la radio y que todos los botones y palancas funcionan correctamente o si los ha cambiado alguna vez.
- Arranca. Fíjate si el coche echa humo por el tubo de escape o levanta el capó para ver si el motor está funcionando correctamente. ¿El vendedor habla en voz alta? Eso es porque no quiere que escuches algo, así que comprueba cada ruido.
- El volante. Observa si la dirección está demasiado dura o extremadamente blanda, colócate sobre una línea recta y marcha sobre ella para comprar si la dirección está desviada.
- Los pedales. Comprueba los frenos, el embrague y el acelerador. ¿Tarda demasiado en frenar? Pregunta si ha cambiado alguna vez las pastillas de freno o el freno de manos. Comprueba también si rasca demasiado al cambiar de marcha. Presta atención, si el embrague está roto o necesita cambiarse es poner el freno de mano y poner la primera marcha, subir hasta segunda y finalmente a tercera. Si no se ha calado el coche antes de poner la tercera es que está mal el plato y hay que cambiarlo.
- Kilometraje. No te fíes de los kilómetros que te diga el vendedor o ponga el auto. Lo más seguro es acudir a alguna marca de concesionarios en la que los kilometrajes se han tasado y verificado correctamente.
- Papeles. Pídele los papeles y revisa si están en regla, no vaya a ser que te hayan timado y vayas a comprar un coche robado. Para ello, un informe detallado en la DGT no cuesta mucho más de 10 € y podrás comprobar el número de dueños que ha tenido o si tiene algún tipo de embargo e incluso las multas.
- Suspensión. Pasa por algún bache, comprueba si bota en exceso y si lo ha cambiado alguna vez.
- Faros. Por último, comprueba si funcionan todas las luces o si alguna vez las ha cambiado o cada cuanto las cambia.
En definitiva, cuando vayas a comprar un coche de segunda mano haz de realizar todas las preguntas que puedas y que conteste, por ejemplo, cada cuanto echa gasolina, si consume mucho, cada cuanto cambia el aceite. Y si no llegas a confiar nunca, entonces métete en este enlace para poder comprar buenos coches de ocasión.